
He leído varios, buceando cada día para conocerme y reconocerme, buscando regular las emociones, intentando gestionarlas de la manera más adecuada, queriendo generar sonrisas y seguir sonriendo.
Nunca se acaba de aprender y he vuelto a caer.
Empecé a leer el índice del libro “La ecología emocional” de Jaume Soler y María Mercé Conangla y no pude resistir la tentación de leer el poema final.
¡Ahora me alegro de no haber jurado! porque después de leerlo he vuelto a caer en la tentación del libro. Creo que promete.
Juzgad vosotros mismos. Aquí os lo dejo.
“ No se podrán llevar la música
nadie nos la podrá robar…
se halla en nuestro interior.
No podrán decidir nuestra actitud
ni qué ni a quién amamos,
ni cómo amamos…
este es nuestro poder.
Hemos escogido ser y hacernos.
Lo que ahora somos, y lo que podemos ser,
no es cosa de los demás,
ni su culpa…
es nuestra responsabilidad.
Tenemos todo un mundo
interior y exterior
para explorar y compartir,
lo podemos destruir o lo podemos mejorar…
Los límites
son cosa nuestra,
crear o destruir
crear o destruirnos…
Esta elección es nuestra.
¡No podrán quitarnos la música!
Y ahora que lo habéis leído, preguntaos si no se lo diríais a más de uno… Y de dos.